miércoles, 4 de marzo de 2009

TSE, DEMOCRACIA Y LIBERTAD

En un comunicado de prensa el Colegio de Periodistas de Costa Rica se muestra preocupado y en contra de acciones restrictivas de la libertad de expresión, sobre todo en materia de propaganda política.
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Dos hechos que surgen en los últimos días del Tribunal Supremo de Elecciones deben llamar la atención de los costarricenses para fortalecer la democracia y el rol de los medios informativos serios. El primero es una acusación en contra de algunos medios que se dice desobedecieron a ese Tribunal al no atender la orden de reportar cada semana la pauta publicitaria o no dar las tarifas en relación con la publicidad sobre el TLC en octubre del 2007. Denuncia que en el caso de Radio Rica, por los documentos suministrados por la empresa, no tiene sustento alguno. El segundo es una novedosa resolución para aplicar sanciones por el uso de publicidad electoral en internet, donde se prohíben los correos electrónicos y mensajes a quienes no han autorizado su recepción. Acá se establecen, difícilmente, limitaciones entre propaganda e información. Dichosamente no se prohíbe la existencia de páginas de los grupos, ni el intercambio de información por esta vía de sus simpatizantes. En este proceso electoral que se avecina es necesario que todos estemos atentos al accionar del Tribunal Supremo de Elecciones para evitar cualquier resolución que pueda interpretarse como un exceso de sus potestades o un acto intimidatorio en contra de los periodistas o medios de comunicación. Recordemos que son las organizaciones sociales, como mecanismos ciudadanos, las que deben observar, analizar y criticar el papel de los medios de comunicación, tal y como lo recomienda Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA). Por su parte, los medios de comunicación tienen una responsabilidad mayor en su forma de actuar para evitar cualquier acción de los órganos del Estado que se justifique. Todos sabemos que la libertad encuentra sus límites en la responsabilidad, si realmente queremos defender la democracia y la libertad de prensa y expresión. Y los periodistas tienen la obligación de buscar un ejercicio profesional de calidad que contemple el debido equilibrio, la precisión, la actualidad, la relevancia, el contraste, la veracidad, el rigor, deben verificar siempre las versiones y sobre todo actuar con la mayor ética posible.
Junta Directiva 2009








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